Consejos para combatir el insomnio

Uno de los múltiples beneficios del mindfulness es que nos ayuda a reducir el insomnio, ya que, además de ayudarnos a focalizar nuestra atención en el presente y en nuestras sensaciones corporales también nos ayuda a aceptar nuestras sensaciones corporales sin juzgarlas ni resistirnos a ellas y nos relaja.

Por eso, aquí tienes 5 consejos para combatir el insomnio desde la aceptación y el mindfulness.

1. Medita a diario. Adquirir el hábito de realizar meditaciones de atención plena durante el día te ayudará a dormir mejor y a no despertarte durante la noche. Sin embargo, no es la panacea. Si estás pasando ahora mismo por una época de tu vida en la que te cuesta horas dormirte, meditar diariamente no va a tener resultados inmediatos. En este caso, puedes probar meditaciones guiadas, como el escaneo corporal, mientras estás en la cama. Para esto puedes servirte de las meditaciones guiadas gratuitas que hemos puesto a tu disposición. Para casos de insomnio es especialmente recomendable la de relajación muscular progresiva o el escaneo corporal.
2. Practica fuera de la cama. Si no te llega el sueño, puedes hacer una práctica de atención plena, pero levántate de la cama y hazlo en otro sitio de la casa. Permanecer despierto en la cama por más de 20 minutos crea una asociación de que la cama es para otras actividades además del sueño.
3. No confíes tu sueño a las aplicaciones para dormir, como por ejemplo las que tienen sonidos de lluvia. Mucha gente las usa como sedantes, pero mejor no habituarse a ellas. No deberías depender de nada para conciliar el sueño; ¿qué pasaría si un día tu teléfono se queda sin batería o la aplicación no funciona?»
4. Trata de no forzarlo. Cuando tengas problemas para quedarte dormido en las primeras horas, intente dejar de lado la lucha. Como saben todos los que sufren de insomnio, cuanto más te acuestes tratando de dormir, más no sucederá. Observe sus preocupaciones por no poder dormir, su mente ruidosa, y visualícelos flotando. Cuanto más hagas esto y aceptes que no puedes forzar el sueño, más fácil será el sueño.
5. Estate dispuesto a estar en contacto con el insomnio. Cuanto menos queremos estar en contacto con las sensaciones corporales y pensamientos que acompañan a la situación de insomnio, más vamos a gastar energía inútil en intentar dormir. 
6. Aunque suene paradójico, si aprendes a aceptar el insomnio, tardarás menos en dormirte.